No, ni estoy embarazada, ni pienso (por ahora) tener un bebé. Pero he de reconocer que mi reloj biológico, a estas alturas, va un poco por libre y empieza a sonarle el despertador. Por eso, cuando Niños pequeños, problemas pequeños cayó en mis manos, lo primero que me llamó la atención fue su portada, que sin duda, anunciaba lo que más tarde me iba a encontrar.