Querido lector:

Te presento mi última novela, Hasta donde termina el mar, Premio de Novela Fernando Lara 2021. Se trata de una historia de misterio ambientada a principios de siglo XX. Comienza con una terrible tormenta y un naufragio en la costa de Vizcaya: los hermanos Morgan observan desde la playa cómo se hunde el barco de su familia, al tiempo que las olas arrastran hasta la orilla a una extraña joven sin pasado: Ofelia. La chica misteriosa guarda un inexplicable parecido con una muchacha desaparecida en la misma zona hace ya más de veinte años. El misterio que envuelve las desapariciones de varias jóvenes de los pueblos costeros es, junto con la identidad de Ofelia, la trama principal de la novela. La relación de los hermanos Morgan y Ofelia dará pie a un potente triángulo sentimental. A pesar de sus diferencias, los Morgan y Ofelia formarán un trío inseparable que tratará de descubrir quién está detrás de las inquietantes desapariciones.

La importancia de la comunidad es otro de los temas principales de la historia. Los pueblos costeros, por su cercanía y su relación con el mar, son ricos en mitología y dan pie a muchas leyendas. El imaginario colectivo tiene un gran protagonismo en esta novela: sirenas, lamias o monstruos marinos recorren sus páginas.

Hasta donde termina el mar es una intriga de época. La niebla y la bruma marina que flotan en el ambiente envuelven al lector casi como si estuviera en la misma orilla del Cantábrico. El pequeño pueblo de Ea, en la costa de Vizcaya, donde se desarrolla la acción, es otro de los protagonistas. De la mano de los personajes recorrerás las callejuelas estrechas de su casco antiguo hasta su puerto pesquero, visitarás la bahía de aguas turquesa o las pequeñas calas escondidas. Pero en esta historia también podrás asomarte a los acantilados para sentir la fiereza del mar o pasear por los caminos entre valles sinuosos que unen los pueblos de la costa, atravesando un frondoso bosque que esconde más de un secreto.

Deseo que esta historia te llegue al corazón.

Gracias siempre.
Alaitz Leceaga

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