María Florencia Freijo: "Seguimos siendo sexistas y no nos damos cuenta"

Hablamos con la autora de 'Decididas' y '(Mal) Educadas' sobre poder, autocrítica y referentes

María Florencia Freijo es licenciada en Ciencia Política y está especializada en perspectiva de género en el sistema de justicia. Su trabajo como asesora legislativa, ayudando a reducir la brecha de género en el área pública y en el sector privado, la ha llevado a los principales medios argentinos y a ofrecer charlas en universidad latinoamericanas y europeas. Ha trabajado en Argentina, Alemania, Paraguay y Ecuador en temas relacionados con el desarrollo humanitario y de acceso a los derechos humanos. 

Su anterior libro, (Mal) Educadas, una revisión de la (mala) educación recibida por las mujeres en base a unos arquetipos y normas sociales marcados por la sociedad, se convirtió en un fenómeno editorial en Argentina y ha sido publicado también en México, Uruguay, Ecuador y España, este publicado por el sello editorial Temas de Hoy. Con su nueva obra Decididas. Amor, sexo y dinero analiza de qué forma se ha apartado históricamente a las mujeres del poder.

De eso y otros temas hemos hablado con ella en la siguiente entrevista con motivo del Dia Internacional de la Mujer 2023: ⤵️

¿Por qué el amor, el sexo y el dinero son los tres pilares fundamentales?

En realidad son aquellas tres áreas donde las mujeres vemos menguado nuestro poder de decisión. Son tres áreas en las que se nos dice que para ser una mujer con poder tenemos que ser autónomas en estos enfoques. En realidad, la sociedad todavía no está preparada para que podamos serlo. Se nos exige algo cuando el entorno no está modificado para ello, y esto termina generando una tensión enorme.

En las narrativas del amor romántico sigue imperando que tenemos que amar sin condiciones, pero eso tiene una condición, y es que nos amemos poco a nosotras mismas. Para amar abnegadamente, nos tenemos que amar menos a nosotras, no pueden convivir ambos tipos de amor.

En el sexo lo mismo. Las mujeres tenemos que estar dispuestas en lo sexual pero la contraprestación es que nuestro placer no esté en primer plano.

"Se nos dice que para ser una mujer con poder tenemos que ser autónomas en el amor, el sexo y el dinero. Pero la sociedad todavía no está preparada para ello."

Y en el dinero, exactamente lo mismo. El dinero se establece como contrapartida del amor. Es decir, si amas lo suficiente, no tienes que poner por delante las condiciones económicas que exigen una negociación en cualquier relación laboral, amorosa o familiar. 

Perdemos poder por varias razones, pero primero porque no tenemos voz, porque estamos cansadas, sobrecargadas, y porque los mandatos de estas tres áreas terminan siendo contradictorios con lo que realmente tiene que ver con nuestra autonomía e independencia.

¿Nos podrías explicar el concepto de 'código bi-normativo'?

Hablamos de bi-normativo porque es el código que estructura la sociedad sobre la base de la idea de la complementariedad de los sexos. Es tan fuerte que permea a todo lo que nos educa como hombres y como mujeres, y nos dice cómo tiene que ser un hombre y cómo tiene que ser una mujer.

Obviamente olvida la diversidad de género y establece una especie de complementariedad, que en realidad es una mentira, que es la idea básica de que las mujeres son quienes tienen que sostener el mundo de los cuidados, del amor, de los afectos… mientras los hombres trabajan, están en el mundo productivo y demás. Nos sacan a las mujeres y a los hombres de estas otras áreas a las que podríamos pertenecer, en las que que podríamos también desarrollarnos.
 
El mundo del trabajo está dividido de manera bi-normativa y el código no es inocente. Lo tenemos internalizado muy inconscientemente, incluso quienes más creemos en la igualdad, así que les invito a que puedan desactivarlo.

¿Cómo de importante consideras que es ser crítica con tu entorno en tema de igualdad?

Creo que es muy importante ser crítico, no solo con el entorno sino sobre todo con uno mismo, porque no nos damos cuenta de la cantidad de sesgos cognitivos e ideas inconscientes que operan y que nos hacen ser sexistas cuando encima creemos y estamos convencidas y convencidos de que no lo somos. 

"Hay muchos microsexismos en esta sociedad y muchos hombres y mujeres que los tenemos."

Eso es lo más peligroso, porque encontrar a alguien que tiene una actitud machista a veces es muy fácil. El problema son aquellas actitudes que disfrazamos, que pretendemos que no tienen nada que ver con el sexismo o la cuestión de género, y que sin embargo, sí que tienen. Esto está generando una desigualdad enorme en las mujeres, como por ejemplo las mujeres que no soportan a otras mujeres en el poder o los varones que siguen creyendo que las mujeres manejamos mal.

Hay muchos microsexismos en esta sociedad, y hombres y mujeres que los tenemos. Así que es importante que seamos autocríticos y que también nos animemos a cuestionar el entorno.

¿Qué mujeres tienes como referentes tanto a nivel literario como en tu vida personal?

En mi vida personal mis dos mujeres principales son mi mamá y mi abuela. Mi mamá me enseñó a alzar la voz ante las injusticias y mi abuela es un poco ese faro por el que escribo, son las olvidadas, las invisibles, a las que nunca se escuchó, a las que nunca se les valoró el trabajo doméstico, de crianza y afectivo que han hecho con su familia. Así que son mis dos mujeres más importantes.

Y después obviamente tengo muchas referencias literarias que van desde Marcela Lagarde a Clara Coria, que habla del sexo oculto del dinero y su trabajo fue fundamental para poder escribir Decididas. Hay muchas en Argentina, como Diana Maffía también, que siento que soy injusta porque son muchas las que me forman y me han formado.

Si como indicaba Freijo, te parece importante descubrir nuevos referentes, analizarte y detectar esas creencias que siguen sosteniendo el sexismo, te recomendamos una serie de lecturas especiales con motivo del Día de la Mujer, empezando por leer a la propia María Florencia Freijo. ¡Imperdible!