5 cosas que me enseñaron los libros sobre cómo amar

¿A quién no le gusta una historia de amor? Los fans de la lectura como nosotros disfrutamos leyendo sobre parejas bonitas, amores imposibles, historias de amor que empiezan, que acaban... Lo que sea que nos haga sentir esta emoción tan especial, ¿verdad? 

Y hoy precisamente queremos hablaros de la importancia de que en la literatura podamos encontrar miles de historias de amor y gran variedad de personajes que aman y viven el amor de maneras distintas.

Porque la ficción es una maravillosa puerta de entrada a comprender mejor la realidad y a avanzar hacia una sociedad más justa e igualitaria, por ejemplo, en cuanto a derechos de la comunidad LGTBIQ+ se refiere.

Y es que a día de hoy todavía son muchas las personas del colectivo LGTBIQ+ que se encuentran con incomprensión, intolerancia e incluso violencia para amar libremente a quien quieren. 

Y con eso volvemos a los libros, una fuente inagotable de inspiración y aprendizaje en favor de la tolerancia y el respeto. Las páginas impresas tienen el poder de enseñarnos valiosas lecciones sobre cómo amar y construir relaciones sanas.

Por eso, y coincidiendo con el mes del orgullo LGTBIQ+ queremos repasar algunas de las cosas que los libros nos enseñan sobre el amor, la libertad y la tolerancia. ¿Nos ayudas a ampliar la lista?

1. El amor propio es la base

Para amar a alguien de forma sana y sin malos rollos, el primer paso es aprender a amarse a uno mismo. Antes de poder amar a otra persona plenamente, es esencial cultivar el amor propio, aprender a aceptarnos y valorarnos tal y como somos. Y para ello hemos de disponer de la libertad de ser nosotros mismos para disfrutar libremente de nuestro cuerpo.

Esto, por desgracia, no siempre ha sido posible, pues a lo largo de la historia podemos encontrar muchos ejemplos de control y represión de los cuerpos. De esto nos habla, precisamente, Olivia Laing en su último ensayo Todos los cuerpos. En este libro, Laing explora la relación entre el cuerpo y el poder, desde los derechos LGTBIQ+ hasta los movimientos feministas y los derechos civiles. A través de su propio viaje y la vida de Wilhelm Reich, Laing nos sumerge en las luchas históricas por la libertad corporal, abordando figuras icónicas como Nina Simone, Sigmund Freud y Malcolm X.

2. La importancia de ser uno mismo

Directamente relacionado con el amor propio, está la importancia de ser uno mismo. No debemos pretender ser alguien que no somos para complacer a los demás. La verdadera conexión surge cuando nos mostramos auténticos y permitimos que nuestra pareja haga lo mismo. En ocasiones, puede llevarnos un tiempo saber quiénes somos o aceptarlo, puesto que la presión social y cultural también impone unos clichés y normas que pueden no responder a lo que cada uno siente.

Por suerte, tenemos grandes pensadoras como Judith Butler, entre otras, que han estudiado como influye esta presión social en cuestiones como, por ejemplo, la definición de género. Su obra El género en disputa es un ensayo de referencia para todos aquellos que se cuestionan su propia identidad sexual.

Y para saber más sobre las experiencias personales de personas que han tenido que redefinir su género y luchar contra la incomprensión para poder ser ellas mismas, tenemos otras muchas obras interesantes. En Me llamo Eva, por ejemplo, la influencer Eva Vildosola habla en primera persona de la disforia de género y lo que supone cambiar de sexo. En El arte de ser normal, Lisa Williamson nos cuenta una historia parecida en forma de novela y enfocada a un público más juvenil. 

3. El respeto y la tolerancia, indispensables

Esto no tendría que ser necesario ni mencionarlo, pero por desgracia, cada día vemos más casos de abusos y agresiones a personas por razón de su orientación sexual, por lo que vamos a subrayarlo para que quede claro: el respeto y la tolerancia son indispensables para el amor, y sin ellos, podemos caer en situaciones de bullying, de discriminación o incluso violencia.

Son muchos los autores que han levantado la voz para advertir sobre el abuso y las agresiones a las que se ven sometidas las personas de los colectivos LGTBIQ+. Sin ir más lejos, en el libro No estamos tan bien, Rubén Serrano habla de las dificultades que se han encontrado muchas personas al tratar de vivir fuera de "lo normativo".

Sin la necesaria tolerancia y empatía, las personas con diferentes orientaciones sexuales dificilmente podrán encontrar el amor propio necesario para desarrollar sus relaciones de forma sana y natural. Y por eso es tan importante leer y escuchar a voces como las de Serrano, que ponen sobre la mesa todo lo que todavía nos queda por avanzar hacia una sociedad más justa e igualitaria.

La mayoría de las novelas de Nando López, por otra lado, suelen tratar de forma más o menos directa sobre estas cuestiones. Su obra se ha convertido en ejemplo y referencia, especialmente para las generaciones jóvenes, de la tolerancia y el respeto a todas las opciones sexuales, por lo que no podemos más que recomendar que leáis obras como El río de las primeras veces, La edad de la ira y Los elegidos. 

4. Los referentes son importantes

Lo decíamos de Nando López y Rubén Serrano. A veces, los libros, más allá de entreternos, también nos enseñan una realidad y nos ayudan a reflexionar sobre ella, al mismo tiempo que sus personajes se convierten en referentes de quienes somos y quien queremos llegar a ser.

Lo dice maravillosamente bien Inés Martín Rodrigo, que acaba de publicar Una homosexualidad propia: "La literatura como refugio, sí, siempre, pero también como faro alumbrador de realidades".

Por otro lado, TJ Klune, responsable de hacernos llorar a mares con sus maravillosas La casa en el mar más azul y Bajo la puerta de los susurros, ha dicho en alguna ocasión que "necesitamos a personas queer contando historias queer, pero no solo para gente queer. Son para todos los que quieran leerlas".

Sin duda, su última novela es un gran ejemplo de que la etiqueta LGTBIQ+ no debería limitar la obra a la hora de ser leída, al contrario: debería convertirse en disfrute y referente para todas las personas a las que llegue esta historia.

Y la historia de Nick y Charlie, los protagonistas de Heartstopper, es prueba de ello: Un fenómeno editorial que ha dado pie a una serie de gran éxito a todos los niveles y para todo tipo de personas. Y que sí, que también era de hora de que la comunidad LGTBIQ+ tuviera este tipo de ficciones y de que los adolescentes crezcan con referentes como este en las escuelas e institutos.

En este sentido, os recomendamos que dejéis un momento de leernos y os paréis a escuchar a voces que cuentan, como las de Javier Giner, Noemí López Trujillo y Bob Pop.

5. Amar con libertad

De Heartstopper también hemos aprendido la importancia de contar con buenos amigos que estén a nuestro lado para ayudarnos en esos momentos más complicados. ¿Qué sería de nosotros sin amigos con los que desfogarnos o pedir consejo sobre nuestras relaciones amorosas? 

Pero sin duda, la gran lección que tenemos que aprender sobre el amor es que todo el mundo tiene derecho a amar con libertad. Muchas han sido las personas que, a través de sus libros, nos han hablado a lo largo de los años sobre la identidad sexual y sobre luchar por el derecho a querer a quien quieran de forma libre.

Desde autoras clásicas como Djuna Barnes o George Sand, hasta ensayos contemporáneos como el de Inés Martín Rodrigo o la novela de Camila Sosas Villada Las malas, todas sus obras nos recuerdan que nadie nos puede imponer nuestra orientación sexual, nuestros gustos y nuestra pareja.

Parece una obviedad, pero cuando vemos los casos de intolerancia que se dan en ámbitos como el del deporte, por ejemplo, vemos que todavía queda mucho por hacer y por reivindicar. Por eso, también vale la pena celebrar que haya libros como Balón amarillo, Bandera arcoíris o revistas como Shangay, que visibilizan otras formas de amar y, de esta manera, contribuyen a normalizarlas.